ASÍ FUE LA SEXTA EDICIÓN DEL CONGRESO DE BAILES LATINOS
Cullera Salsa Festival: cinco días de playa y fiesta sin perder la línea
Los destinos playeros se posicionan en agosto como primera opción para olvidarnos del jefe, los atascos, y sobre todo de la odiosa dieta. Si tu abdomen también ha experimentado las dramáticas consecuencias de las vacaciones, tal vez te ha faltado añadir algo de salsa a tu viaje, pero desde luego no la que se moja con pan. Los asistentes al congreso de bailes latinos de Cullera regresan de su semana de descanso con tipín.
Dicen los expertos que en tan sólo una semana de excesos podemos engordar hasta dos kilos de grasa, y que a partir de los 15 días de descontrol comenzamos a perder la forma física. Tantos meses de sacrificio y constancia se vienen abajo por olvidarnos de contar calorías durante sólo unos días...
¿Y si a la playa, la piscina, las terracitas y la fiesta le añadimos un poco de actividad? No se trata de salir a correr una hora al día, sino de incorporar a tus vacaciones una actividad saludable, divertida y que cada año cuanta con más adeptos: los bailes latinos.
Salsa, bachata y kizomba encuentran en la costa levantina el escenario ideal de convivencia con los planes veraniegos. Por sexto año consecutivo, Valencia recibía hace unos días a cientos de bailongos con motivo del Cullera Salsa Festival, uno de los favoritos por su ritmo relajado y especialmente compatible con el ocio.
Junto a los talleres y los shows, que como cada año ha acogido el hotel Cullera Holliday, son famosas sus fiestas latinas en la arena y en la piscina, que se alargan más allá del anochecer, y casi enlazan con la fiesta nocturna.
El baile social no termina hasta las 6.00 de la mañana y los talleres comienzan a las 11.00, así que más te vale preparar tu cuerpo para dormir lo justo y disfrutar al máximo. La playa y una buena sombra serán tus mejores aliados si sientes la llegada del hombre del mazo.
Nombres como Adrián & Anita, Ronald & Alba, Fernando Alonso & Ayelén Gauna o Luis Chávez & Alba han sido protagonistas de un cartel especialmente diseñado para los amantes de la salsa, pero que no deja de complacer a quienes se decantan por la bachata o la kizomba. De hecho, esta edición ha contado con tres espacios diferenciados, uno por cada ritmo, tanto para los talleres como para el ocio nocturno.
Si tu cuerpo de jota no te impide resistir las siete horas diarias de clase, la posterior fiesta en la playa y las seis horas de baile social, no habrá suficientes tapas y helados en Cullera para hacerte perder la línea. Hecha cuentas: una sola hora de salsa te hace quemar cerca de 400 calorías.
Aunque el congreso con más afluencia de Valencia llegaba a su fin el pasado domingo, los aficionados a la bachata tienen una nueva cita entre los días 25 y 28 en el mismo lugar con el Bachatazo Beach Festival. No obstante, como en el anterior, los tres ritmos encontrarán su sitio en esta segunda semana de congreso en Cullera.